“Tocar las estrellas” 2023
Estoy trabajando en un proyecto de arquitectura efímera, una instalación que cambia y modifica el suelo que pisamos.
Percibo un empeño en dar la vuelta a las cosas que puede ser un reflejo de que todo esta “patas arriba” o que estamos buscando un cambio.
Pienso en los paralelismos del S. XX y XXI, en como encajar las piezas. De la revolución tecnológica de principios del S. XX a la digital que estamos viviendo. De la “Fiebre española” de 1918 a la pandemia del COVID 19 que paralizo el mundo en 2020. En el Crack del 29 y la crisis económica que comenzó a finales de los 2000.
Ahora mismo, si “paseas” por IG, percibes una estética de colores pastel, superficies acolchadas y texturas suaves que invade edificios, muebles, ropa, calzado, plantas, recubre monumentos y transforma en objetos “agradables” e “inocentes” todos los ámbitos en los que se aplica. Yo lo he denominado “Utopía”. En los Locos años 20 del siglo pasado, después de la Primera Guerra Mundial, hubo una explosión de colores pastel, para recuperar la inocencia, una deshinibición para olvidar los horrores vividos. Creo que es un reflejo de aquello, trasladado a los medios que tenemos ahora y que la IA facilita, a la cual puedes decirla que convierta la Torre Eiffel en un hinchable o la Gran Muralla China. Todo lo que se nos ocurra. Queremos volver a la inocencia y frivolidad, a la ingenuidad y la libertad sin límites.
Todos los referentes, todos los monumentos, los conocemos al dedillo sin haberlos visitado, o antes de hacerlo en persona, de hecho, muchas veces nos pasan desapercibidos o no nos llaman la atención por que no son una novedad, por que los tenemos interiorizados, por que ya estamos saturados de verlos: en las noticias, en las películas, en las redes sociales… y como construir nuevos referentes es complicado y costoso lo que hacemos es modificar los existentes a algo que no habíamos visto antes. Creamos mundos nuevos, idealizados, de color de rosa pastel.
Vuelvo al suelo, al proyecto que estoy trabajando: al final funcionamos con representaciones y ahora mismo no sabemos que hay bajo nuestros pies. Creo que tenemos la sensación de pisar arenas movedizas. Todo es inestable. Creo que queremos despegarnos del suelo, sobrevolarlo, levitar, y lo hacemos a través del escapismo que nos permite lo virtual. En el metaverso, o en IG, o cualquier red social, no puedes pisar una mierda ni mojarte, estas a refugio de todo eso. Puedes reinventarte, ser otro, volver a empezar.
Después de la pandemia, el 2020 en concreto, alguien (creo que un niño o un adolescente) lo definió como el hecho de ir a cruzar la calle, mirar a ambos lados y asegurarte que no viene ningún coche y al cruzar verte arrollado por un submarino.
Sigo trabajando en un suelo que poner bajo nuestros píes.